domingo, 16 de enero de 2011

molicie

caminar sentir grisaceo como tarde de verano con rafagas de viento que traen un poco de brisa de playa hasta aca donde reviso el internet y escucho Ritmo son latino sin gusto sin atreverme a regalarme una noche a solas porque hay demasiada gente en la calle y la soledad a medias me incomoda.

sábado, 2 de octubre de 2010

sin poesía

No el azul noche de tristezas, ni el celeste gris de nostalgia de alguna mañana de casi invierno, sino plomo, plomo de humo, de bochorno sin sol, de congestionamiento en las pistas, y en contraste los colores chillones de anuncios huachafos o no cubiertos de polvo, afiches de políticos, que no entiendo, qué sentido tiene poner su cara con una sonrisa bastante disforzada, ni son guapos, ni se ven sinceros y creo que nos subestiman bastante si gastan tanta publicidad para hacer que recordemos un rostro que con nada se identifica, ya que no ponen propuestas ni reparten folletos con ellas, sino que intentan que memoricemos sus nombres y el de su partido; y además ponen, en todos los postes, su propaganda multiplicada por cuatro y una encima de otra, a ver cuál partido gana, no creo que sea una buena estrategia, nadie quiere que le malogren el vecindario.

La cara me quema, el aire me marea, ya que dentro de la combi nadie se digna a abrir alguna ventana, no sé, además, cuál serí la diferencia; respiro monóxido de carbono de las otras respiraciones y sigo viendo: colores opacos de unas pocas plantas cubiertas de hollín, rodeadas de la basura que no se recoge o que bota la gente al paso, y tierra.

Desvíos intermitentes por toda la avenida, tierra, cemento y tráfico: "las molestias pasan, las obras quedan", ojalá que pasen pronto y que realmente funcione. Irrisoriamente, o no tanto, algunos cobradores intentan que pagues más porque hacen mayor recorrido, te demoras el doble y te dejan en algún paradero que no haya sido removido, que no necesariamente es el de una. Aquí bajo.

martes, 13 de abril de 2010

Considerando en frío, imparcialmente

Considerando en frío, imparcialmente,
que el hombre es triste, tose y, sin embargo,
se complace en su pecho colorado;
que lo único que hace es componerse
de días;
que es lóbrego mamífero y se peina...

Considerando
que el hombre procede suavemente del trabajo
y repercute jefe, suena subordinado;
que el diagrama del tiempo
es constante diorama en sus medallas
y, a medio abrir, sus ojos estudiaron,
desde lejanos tiempos, su fórmula famélica de masa...

Comprendiendo sin esfuerzo
que el hombre se queda, a veces, pensando,
como queriendo llorar,
y, sujeto a tenderse como objeto,
se hace buen carpintero, suda, mata
y luego canta, almuerza, se abotona...

Considerando también
que el hombre es en verdad un animal
y, no obstante, al voltear, me da con su tristeza en la cabeza...

Examinando, en fin,
sus encontradas piezas, su retrete
su desesperación, al terminar el día atroz, borrándolo...

Comprendiendo
que él sabe que le quiero,
que le odio con afecto y me es, en suma, indiferente...

Considerando sus documentos generales
y mirando con lentes aquel certificado
que prueba que nació muy pequeñito...

le hago una seña,
viene,
y le doy un abrazo, emocionado.
¡Qué más da! Emocionado... Emocionado...
César Vallejo

sábado, 10 de abril de 2010


Maurits Cornelius Escher

viernes, 9 de abril de 2010

Historia


puedes contarme cualquier cosa

creer no es importante

lo que importa es que el aire mueva tus labios

o que tus labios muevan el aire

que fabules tu historia tu cuerpo

a toda hora sin tregua

como una llama que a nada se parece

sino a una llama


Blanca Varela